
LLAVES PARA LA ORACIÓN CONTESTADA
Por Rhonda Sciortino

LLAVE No. 11: DA A OTROS (2)
Igualmente importante es dar de tu tiempo. Esto incluye pasar los primeros momentos de cada día con Dios.
Esto también significa dar tiempo para ayudar a otros.
Tu servicio puede ser organizado, como ser voluntario en una iglesia u otra organización de servicio.
Dios dijo en Su Palabra que, cuando hacemos algo bueno por el menor de Sus hijos, se lo hacemos a Él (Mateo 25:40).
¡Imagina eso! Dios lo toma como un favor personal cuando hacemos algo por uno de Sus hijos.
Tú también puedes dar tu tiempo en formas que son espontáneas, como salir fuera de tu rutina para ayudar a un compañero de trabajo con algo en lo que está teniendo problemas para procesar, dejar que otro auto se cambie en tu carril durante la hora de tráfico, o llamar a alguien que está pasando por un momento difícil para darle ánimo.
Tomando el tiempo para ayudar a otros cuando no esperas nada a cambio, especialmente ayudando a aquellos que no pueden hacer nada para nosotros o
por nosotros, es sacar a Cristo de la iglesia y sacarlo al mundo. De esta manera, podemos participar con Dios en responder a las oraciones de otros.
Ayudar a otros mientras estamos en espera de la contestación a nuestra oración, muestra a Dios que no estamos totalmente centrados en nosotros mismos y nuestras necesidades, sino en Dios y lo que quiere hacer en la tierra.
Ayudar a otros cambia nuestro enfoque de nosotros mismos, al menos por un tiempo, y a enfocarnos en otra persona.
Siempre hay alguien que está peor que nosotros. Y ayudar a alguien muestra que tenemos fe en que Dios está trabajando de nuestra parte.
Según Proverbios 21:13, “Si un hombre cierra sus oídos al clamor del pobre, él también pedirá a gritos y no será contestado.”
Para decirlo simplemente, si no ayudamos a otros, puede que Dios no nos ayude. En la Palabra de Dios aparece el tema recurrente de cosechar lo que sembramos (Galatas 6:7-9).