Formación para novios y esposos
El misterio de la fidelidad (4)
de amor a través de la realización del proyecto matrimonial, el cual va más allá de los aspectos psicológicos porque involucra toda la existencia de la persona y afecta todos los niveles de su existencia.
En la medida en que se va comprendiendo la grandeza de esta relación, la fidelidad surge como una consecuencia natural al tomar consciencia de la belleza del nuevo estilo de vida.
La segunda dimensión es la acogida o aceptación. Cuando se entiende gradualmente la importancia de la relación matrimonial, surge la aceptación diligente del vínculo aunque no se conoce toda la riqueza ni la profundidad que implica.

Es una aceptación basada en la razón, el afecto y la fe.
Abre la puerta al deseo de hacer realidad ese proyecto de vida y a la acción de Dios que suple lo que humanamente no se alcanza a comprender, es decir, el misterio del amor de Dios a través del amor de los esposos.
Esto los ayuda a ubicarse mejor en el contexto de la relación basada en el amor, el respeto, la apertura al otro y la vivencia de la fe.
La tercera dimensión es la coherencia.
Una vez que se han dilucidado el sentido, las características y la finalidad del matrimonio, naturalmente surge el deseo de vivir integralmente esa relación especial.
Se asume con decisión, ilusión y valor. Se defiende y se testimonia incluso en situaciones de adversidad, crítica o incomprensión por parte de otras personas.
De la misma manera, se opta por este nuevo estilo de vida en momentos en que se proponen situaciones, ideas o actos contrarios a la fidelidad matrimonial.
Esa es la coherencia auténtica.
Conservar y defender la fidelidad se vuelve algo natural, inherente a la psicología y espiritualidad de los esposos porque ya están disfrutando los frutos que su amor exclusivo, fiel y